Al concluir la ceremonia, un grupo de alcaldes panistas que forman parte de la Asociación de Municipios por Yucatán (Ampyac), le entregaron una carta a Calderón Hinojosa en la cual, -dijeron- le exponen las arbitrariedades que se están cometiendo contra el presidente municipal de Sotuta, Ernesto Díaz Castillo, contra quien el Congreso del Estado inició un procedimiento de juicio político.
“Con estas obras queremos unir más a Yucatán y la Federación, este puente debe hermanarnos más, debe ser un puente que no sólo comunique mejor a Progreso y a Yucalpetén sino también a Yucatán con el país, un puente que significa unidad y esfuerzo”, indicó Calderon.
El país está en tiempos electorales, la presencia del presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, al Estado lo hizo evidente. En esta ocasión no hubo grandes operativos de seguridad ni rigorosas revisiones.
Sonrisas de los integrantes del Estado Mayor Presidencial, saludos de cortesía e indicaciones en un tono inusual entre los encargados de logística presidencial, escasa presencia militar y revisiones discretas, algo se “veía” diferente, no había prepotencia ni caras adustas. Estamos en tiempos electorales.
Cuando el Presidente atravesó el trecho que lo llevaría del campo “Alonso Diego Molina” al estacionamiento del inmueble, el espacio destinado para su intervención parecía el escenario para un partido de fútbol, de un lado la “ola roja”, que vitoreó a su capitana, Ivonne Ortega Pacheco, cuando pasó frente a ellos; por el otro, los “seguidores” de Calderón Hinojosa, que no perdieron la ocasión para recordarle a los priista quien mandaba en esta ocasión. “Felipe, presidente”, se escuchó varias veces.
Pero había “palcos” especiales, esos fueron ocupados por los “unidos” legisladores blanquiazules del Congreso Local. Al “jefe” había que demostrarle que no es real lo del rompimiento panista en Yucatán…aunque a uno de los “líderes” del grupo de “choque” renovación, Julio Garrido, se le olvidó asistir.
A quienes les “sentó” bien la visita presidencial fue a la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco, que, por cierto, lució un elaborado peinado, y al alcalde de Mérida, César Bojórquez Zapata, quienes después de varias discrepancias volvieron a estar “juntos”, aunque a la distancia no se notaba mucho diálogo entre ellos… “¿habrá aprovechado el edil para solicitarle la tan añorada audiencia?.
Lo cierto es que la ausencia de algunos, la presencia de otros sólo anunciaron algo que ya es toda una realidad: el país está en tiempos electorales y en Yucatán el juego ya comenzó.
